El uranio es un metal de color blanco argentífero (parecido a la plata), duro y radiactivo. La superficie de la tierra tiene un promedio de 3 gramos de uranio por tonelada y es 1,000 veces más abundante que el oro. La importancia de estos estudios en todo el país radica en que el uranio, es capaz de reemplazar a cualquier combustible fósil y es generadora de energía limpia, es decir, genera menos contaminación ambiental. Una tonelada métrica(TM) de uranio equivale aproximadamente a 84,000 barriles de petróleo y 20,000 toneladas de carbón.
El potencial uranífero del Perú se estudió desde la década de los 50, teniéndose como el estudio más completo el del 2007 realizado por el INGEMMET, los depósitos más grandes se tienen en Bayóvar con 13,000 TM, seguido de Macusani - Puno con 12,200 TM.
En la región Cusco se tiene la presencia de este elemento en la provincia de Canchis y en Vilcabamba perteneciente a la provincia de La Convención. En el momento de la presentación que realizó el INGEMET no se mencionó a la provincia de Canchis, que posee casi 4 veces más de petitorios para proyectos mineros de uranio que Vilcabamba, esta información se encuentra en el material entregado en esta presentación, es decir en manos del INGEMMET.
Sobre los estudios que se llevaron a cabo en Vilcabamba aproximadamente a 4300 msnm, las ocurrencias de uranio son de alta ley y bajo tonelaje, (que se encuentran en mayor concentración pero en menor cuantía), se tienen también mineralizaciones de tungsteno o wolframio y molibdeno. La mineralización de uranio comprende una serie de vetas polimetálicas (que se encuentra en asociación con otros elementos como el cobre, níquel, cobalto, zinc, plomo y plata). Las vetas son angostas, de estructura irregular y mineralización errática, por lo que muchas concentraciones son discontinuas y se consideran no económicas, es decir, que se encuentran muy esparcidas o diseminadas en el área de exploración y se encuentran unidas con diferentes elementos, por lo que explicaría la explotación solo artesanalmente, esta explotación tuvo su mayor auge en los años 50 y 60 con una producción a pequeña escala de 2500 toneladas de uranio. (Gabelam, 1962)
Así como las bondades que trae consigo el Uranio, sus riesgos también son altos, pues al ser un metal radioactivo al cuerpo humano está expuesto a bajar sus defensas y afectar directamente las partes vitales del cuerpo, siempre y cuando el uranio tenga altas concentraciones. Si se ratifica la presencia de uranio en provincias altas del Cusco esta debería ser informada de manera adecuada.
Equipo de la Vicaria de Solidaridad Sicuani
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